Hoy hemos mantenido una reunión en la Cámara de Comercio de Cartagena con su presidente, Mariano Rosique, y varios empresarios del Comité Ejecutivo de la institución ¿El objetivo? Buscar soluciones de forma conjunta ante la actual situación económica. Allí hemos propuesto reducir las cargas administrativas a las pequeñas y medianas empresas (PYMES) de la Región de Murcia un 30 por ciento para mejorar su competitividad. Los trámites administrativos suponen a las empresas un gasto del 3 al 4 por ciento del Producto Interior Bruto.
He dicho en muchas ocasiones que hay que plantar cara a la crisis aportando ideas, y a través de esta medida las PYMES podrían ahorrarse hasta 1000 millones de euros anuales.
Por nuestra parte el Gobierno regional va a encontrar colaboración a la hora de abordar la coyuntura económica, pero no es menos cierto que es Valcárcel a quien corresponde garantizar la solvencia de las empresas regionales. El problema más importante es la financiación, es decir, el capital circulante y las inversiones de carácter fijo de las empresas, y la Comunidad Autónoma tiene capacidad para prestar este dinero, al igual que se está haciendo en otras comunidades. Me alegro de haber coincidido también con el presidente de la Cámara de Cartagena en la importancia de que todas las obras públicas que se desarrollen en cada uno de los municipios de la Región las lleven a cabo empresas locales para promover la creación de empleo. Lo dije ayer. Hoy me reitero: toca defender lo nuestro.
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