14 agosto 2010

Entrevista en La Verdad

Os pongo un enlace con una entrevista que me han hecho en el diario La Verdad.

07 agosto 2010

Todos a una


No seré el candidato socialista a la presidencia de la Comunidad Autónoma en las elecciones autonómicas de 2011. Es una decisión personal que llevo bastante tiempo madurando y a la que me siento impulsado por responsabilidad. Creo que lo más inteligente, que lo mejor para el electorado progresista de nuestra Región es un revulsivo que consiga ilusionar a la población para acabar con el proyecto político agotado del Partido Popular y de Ramón Luis Valcárcel.

Quiero agradecer a mi familia, a mis compañeros y a la dirección federal de mi partido, con la que existe una conexión excelente, el apoyo y la cercanía que me han brindado en las últimas semanas mientras ultimaba esta decisión.

Ahora toca volcar todos los esfuerzos para designar al mejor candidato o candidata a la Comunidad Autónoma. Lo harán las bases del partido y auguro una ardua tarea porque en el PSOE de la Región de Murcia hay mucho capital humano y muy bueno. Por eso hago un llamamiento a nuestra militancia para abordar el próximo proceso con serenidad, ilusión y altura de miras. Toca partido, toca rearmarse, fortalecerse, volver a ilusionarse, mirar hacia dentro y confiar en nuestras posibilidades. Es preciso que seamos generosos y que nuestra voz, la voz de los socialistas murcianos, suene unánime y firme en el convencimiento de que otra Región es posible.

Cuando lo hayamos conseguido, todos a una, será el momento de abrirnos a la sociedad y ofrecerle lo mejor de nosotros. Estoy seguro de que vamos a conseguirlo. Hay esperanza.

06 agosto 2010

Valcárcel y la VPO. Incumplimientos que salen caros


Estos días la vivienda de protección oficial está de actualidad. La ministra del ramo, Beatriz Corredor, ha anunciado recortes presupuestarios en su departamento enmarcados en el Plan de Austeridad abanderado por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. A grosso modo, el plan consiste en eliminar la Reserva de Eficacia que permitía a las comunidades autónoma financiar la superación de los objetivos de ayudas pactados con el Estado. A nosotros, en la Región de Murcia, no nos afectará en absoluto por una simple cuestión: el Gobierno de Valcárcel no ha ejecutado ni el 60% de los objetivos. Otro ajuste viene dado por la supresión de la ayuda directa a la entrada aunque, como contrapartida, se permitirá la ampliación de la hipoteca de las VPO hasta el 90% de su valor; de ese modo también se reduce la necesidad de ahorro para afrontar el pago de la entrada.


El caso es que el presidente de los promotores inmobiliarios de la Región de Murcia, Juan Hernández Albarracín, ha manifestado su desacuerdo con el anuncio ministerial. Está en su perfecto derecho. Asegura que esta medida del Ministerio supondrá que se dejen de construir unas 2.000 VPO en la Región de Murcia. En este punto, me gustaría recabar su opinión sobre el hecho de que desde 2002 hasta nuestros días, los incumplimientos del Gobierno regional del PP en materia de Vivienda de Protección Oficial hayan impedido edificar más de 13.000 viviendas que estaban comprometidas en los diferentes Planes Estatales de Vivienda. ¿Consecuencias? Se han perdido más de 180 millones de euros en ayudas (30.000 millones de las antiguas pesetas, sin contar las ayudas a las empresas de la construcción que promueven este tipo de viviendas) y más de 30.000 empleos en nuestra comunidad autónoma.
Por otra parte, hasta en tres ocasiones Valcárcel se comprometió a avalar el 100% de las hipotecas de vivienda protegida. Comenzó prometiéndolo en 2007, cuando firmó el Plan regional de Vivienda 2007-2010 y volvió a prometerlo en dos nuevas ocasiones en 2009 y a principios de 2010, en sede parlamentaria. La respuesta dada por el Gobierno regional a una solicitud de información del Grupo Parlamentario Socialista, en la que pedía el número de hipotecas avaladas por el Gobierno regional ha sido que ¡No han avalado ni una sola hipoteca!


Por eso me sorprende que el presidente de los promotores no incluya en sus legítimas reivindicaciones la exigencia al Gobierno regional de que cumpla con sus compromisos. Sería lo justo.